Querido Guru Mahārāja. Por favor acepte mis respetuosas reverencias. Todas
las glorias a Śrīla Prabhupāda. ¡¡¡Todas las glorias a Sus Divinos pies de loto!!!
En este auspicioso día de Śrī Vyāsa-pūjā, aprovecho para meditar en la enorme fortuna que siento de haber tenido su śānta asociación durante estos últimos 10 años. Gracias a su misericordia, he podido entender más y más porque los devotos dicen que todo lo que sucede en la vida de uno es la misericordia del Maestro Espiritual, la verdad, esta afirmación era difícil de entender para mí. Pero ahora gracias a esta auspiciosa celebración, he podido tomar un tiempo para ver hacia atrás y darme cuenta como mi vida cambió radicalmente después de entrar en contacto con usted.
Recuerdo que en el año 2012 viaje desde Colombia hasta Ecuador para recibir Su Darsan, se me presentaron todo tipo de obstáculos, recuerdo que estaba padeciendo un problema de salud que se manifestó en Quito cuando entre al baño y vi que estaba orinando sangre, me puse muy nervioso, pero recordé una declaración que había leído hacia poco en un libro sobre la vida de Su Divina Gracia Śrīla Bhaktisidhanta Sarasvatī Thakur, que uno debía estar dispuesto a recorrer kilómetros para tomar la asociación de una persona śānta. Eso me lleno de valor y finalmente pude lograr el objetivo.
En el aeropuerto, no podía controlar mi ansiedad, no me explicaba por qué.
Su vuelo se retraso y eso aumento mas mi ansiedad. Finalmente usted llego, paro su silla de ruedas justo en la puerta de salida y con un entusiasmo que nos abrazo a todos, levanto ambos brazos en señal de victoria. Yo no paraba de gritar Jay!!!Jay!!!(Victoria..Victoria!!), a pesar de que era nuevo en ese entonces y no sabia exactamente bien el significado de tal expresión.
Recuerdo que usted poso su misericordiosa mirada sobre mi por unos cuantos segundos, y senti como si se tratara de un reencuentro, mi ego vanidoso lo noto, y cuando mi mente empezó a hacer alarde en silencio, usted retiro abruptamente su mirada en señal de rechazo… primer instrucción, humildad!!!. Ese recuerdo esta tan vivo en mi memoria, que medito en el todos los días al cantar Śrī Guruastakam, específicamente en la primer estrofa, ya que ese día usted fue para mi, literalmente, como la nube que llego a apagar el fuego de mi existencia material. Quisiera expresar todas las realizaciones que he tenido en mi relación con usted, pero eso haría esta ofrenda mucho mas larga, así que deseo compartir cada una de las experiencias con usted, en cada Vyāsa-pūjā de aquí en adelante.
Por el momento le ruego humildemente que me permita continuar ocupado en su servicio, ya que es el soporte de mi existencia, y también aprovecho esta oportunidad para pedir perdón por todas las ofensas que he cometido en la ejecución de mi servicio, debido a mi torpeza y falta de realización. Querido Guru Mahārāja, por favor bendígame con mas y mas fe y devoción por
usted, ya que si algún día de verdad logro ser su sirviente, mi vida alcanzara la perfección.
Su insignificante y caido aspirante a discípulo,
Harināma Gaurāṅga Das.
ISKCON Bogotá, Colombia.